jueves, 10 de julio de 2008

Nunca vas a volver, porque jamás te vas a ir

Por corresponsal invitado y amigo de la casa.

Llegó un jueves, no se sabía mucho de él. Arribó con el campeonato a horas de comenzar, y con un curriculum bastante gordo que acusaba inferiores en Newell’s y una reciente participación en el Torneo Argentino A en Mendoza. La primer práctica deslumbró, era algo extraño ver un jugador con sus características en ese puesto (hasta en primera división es raro).
El domingo siguiente jugamos contra Bell (Nder: se lesiona Claudio Cano, y hace su debut oficial Luis “como les mentí a esta gente” Apache Romero), el crack lo ve perder a su nuevo club desde afuera por 3 tantos contra 1.
Si en el primer entrenamiento dejó boquiabiertos a quienes tuvieron el placer de verlo, después de entrenar una semana completa se ganó el cariño y la admiración de todos sin ni siquiera haber jugado un minuto. Y en un lapso de 7 días, llegó la verdad, el partido por los porotos, la data marca que el rival fue Villa Argentina y el resultado 3 a 0 (Nder: cabezazo de Botacin, golazo de Quinteros y debut con gol de José "Monito" Rodríguez). Como no podía ser de otra manera, el fenómeno no desentonó, todo lo contrario, dió una cátedra de buen futbol. Aquel día nadie se atrevió a contradecir alguna de estas frases: “Góngora es de otro nivel”, “A Góngora le sobra para jugar acá”, etc, etc.
Tal imagen fue una postal, tres campeonatos fueron suficientes para acostumbrar nuestros ojos a verlo salir con sombreros a los delanteros infinitas veces; o encerrado contra la esquina del corner en cancha de Progreso saliendo con una rabona entre 2 delanteros; o yendo a un cruce ya casi sin chances y terminar saliendo de taco o con pelota dominada. Si no le veías el número de la remera te parecía enganche neto, pero no, era defensor central, puesto que hasta en los libros indican que hay que patear para arriba, y que está destinado para hacer el trabajo sucio, no menos importante, pero sucio al fin. Él no es así, es un extraterrestre en dicha posición como lo fueron (salvando diferencias) Beckenbauer, Passarella, entre otros.
Pero hay algo mejor todavía de este crack, algunos tuvimos la suerte de conocerlo de la línea de cal para afuera, Y ES MUCHO MEJOR JUGADOR FUERA DE LA CANCHA, QUIENES LO CONOCEMOS LO ASEGURAMOS.
Se fue un genio, un distinto, un tipo que se transformó en poco tiempo no sólo en el capitán del equipo, sino también en ídolo indiscutido de todos. Nos mal acostumbraste Víctor, la puerta esta abierta, quieras o no te adoptamos, esta es tu casa y podés volver cuando quieras (esperemos sea pronto, muy pronto).

Queda abierta la puerta a quienes quieran colaborar con este humilde blog. Para hacerlo sólo mandar un mail con la nota a: labandadelrojomsjz@gmail.com.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Grande Victor, gracias por tantas alegrias,lamento muchisimo que no te podamos retener, te comprendo y te entiendo, hasta pronto porque estoy seguro que vas a volver, el Argentino C empieza en enero, te esperamos, La Banda de la tenaza!!!!!!!!!!!!!!... suerte Vìctor